No lo digo yo, que también, lo dice la ciencia, y lo explica exactamente así:
En Galicia, se produce el llamado afloramiento, un fenómeno que se da en las costas gallegas en primavera y verano. En esa dos épocas, el viento del nordeste, el cual nos estropea algunos días de playa, desplazan las aguas de la costa hacia mar adentro, mientras que estas ocupan el lugar de las otras en la costa. Todos sabemos que cuanto más nos adentremos en el mar más fría va a estar el agua, pero lo que no todos sabemos es que también va a poseer más nutrientes y oxígeno.
Este fenómeno conlleva a que los mariscos de nuestra zona tengan una gran alimentación y un hábitat inmejorable, lo cual se refleja, más tarde, en nuestro paladar.